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Tipos de ecosistemas: componentes, características y ejemplos

El planeta es un complejo conjunto de relaciones entre seres vivos y elementos no vivos, que reducidas a ciertos ambientes y con determinadas características se pueden denominar ecosistemas. A continuación, como en ningún otro sitio, presentamos todo sobre los ecosistemas: tipos, elementos, ejemplos y cuadros comparativos.

Qué son los ecosistemas?

Un ecosistema es un sistema formado por un conjunto de organismos, el medio ambiente físico en el que viven (hábitat) y las relaciones tanto bióticas como abióticas que se establecen entre ellos. Es decir, diferentes especies de seres vivos interactúan entre sí y con el medio, determinando un flujo de energía y materia que ocurre en ese ambiente.

Existen una gran diversidad de ecosistemas en el planeta. Todos están formados por factores bióticos (seres vivos) y factores abióticos (elementos no vivos, como el suelo y el aire). Y aunque lo desarrollaremos luego, hay que decir que existen diferentes tipos de ecosistemas: marinos, terrestres, microbianos y artificiales, entre otros.

Características de un ecosistema

Un ecosistema posee ciertas características que lo convierten en tal y también lo diferencia en diferente tipos con otros.

  • Están formados por factores bióticos y abióticos, que se interrelacionan por cadenas tróficas o alimentarias, en lo que es un flujo de materia y energía.
  • Cada tipo tiene un tamaño y estructura distinta.
  • Pueden ser terrestres en relieves de desierto, montañas o praderas; pero también acuáticos de agua dulce y salada o mixtos, como pueden hallarse en humedales.
  • Los ecosistemas suelen ser biodiversos, aunque esa biodiversidad varía.
  • Pueden ser naturales o artificiales (con la mano del hombre).
  • Debido a las múltiples interacciones de sus miembros son sistemas complejos.
  • Son dinámicos y variables, no solo producto del ser humano (muchas veces en un sentido negativo) sino también por factores naturales. Se conoce como la región de transición de los ecosistemas como ecotono.
  • La fuente principal de los ecosistemas proviene de la radiación solar.

Elementos de un ecosistema

¿Pero cuáles son los elementos de un ecosistema? Desde cierto análisis los elementos surgen de las mismas relaciones alimentarias, lo que se conoce como cadenas tróficas. Estas son representaciones sencillas de las relaciones alimentarias entre las especies de un ecosistema determinado. Esto da lugar entonces a una clasificación de los elementos del ecosistema:

  • Productores: Organismos autótrofos capaces de captar la energía del entorno para producir materia orgánica partiendo de compuestos inorgánicos. Aquí podemos hacer una pequeña división dependiendo de la fuente de estos organismos: su fuente puede ser el carbono, entonces tenemos litótrofos y organótrofos (los primeros lo obtienen del CO2, los segundos de organismos);y si la fuente es energía hay fotófrotos y quimiótrofos (los primeros de la energía solar y los segundos de reacciones químicas).
  • Consumidores: Son organismos heterótrofos, es decir, necesitan obtener energía y materia de otros organismos para sobrevivir. Si se alimentan de productores primarios entonces se los denominan herbívoros y luego lo que sigue es una cadena de carnívoros, que son consumidores secundarios y terciarios. No suele haber cuaternarios, aunque si existiera se seguiría esta pauta.
  • Descomponedores: En algún punto son consumidores, pero debe considerarse a este tipo de seres como una categoría aparte en la cadena trófica. Hablamos de organismos que se alimentan de materia orgánica muerta (saprófagos), excrementos de otros organismos (coprófagos) o residuos sólidos del suelo (detritívoros). Mediante el proceso de descomposición transforman la materia orgánica en compuestos inorgánicos, que puede ser utilizada por consumidores primarios que son herbívoros. Este grupo está compuesto por hongos, bacterias, protistas y animales pequeños como babosas o gusanos.

Tipos de ecosistemas

Existen diversos tipos de ecosistemas, que dependerán de qué clases de elementos y seres se interrelacionan (factores bióticos y abióticos). A continuación presentamos una clasificación lo bastante genérica de los tipos que pueden existir en nuestro planeta.

  • Ecosistemas acuáticos: El agua es el componente principal de este ecosistema y es el más abundante: constituye el 75 por ciento de todos los ecosistemas conocidos. Aquí encontramos ecosistemas de océanos y los de las aguas continentales dulces o saladas, como ríos, lagos y lagunas.
  • Ecosistemas terrestres: Tienen lugar sobre la corteza terrestre y fuera del agua en diversos tipos de relieve: montañas, planicies, valles, desiertos, entre otros. Todos ellos presentan grandes diferencias entre sí: temperatura, concentración de oxígeno y clima, por lo que su diversidad es importante.
  • Ecosistemas mixtos: Estos ecosistemas se hallan en zonas de intersección, por ejemplo, un humedal o la costa que combina el componen acuático y el terrestre. Estos ecosistemas híbridos son considerados transiciones entre tipos más nítidos. Aquí tenemos seres vivos que por lo general pasan más tiempo en un ecosistema, pero necesitan del otro para descansar, alimentarse o procesar (por ejemplo, los anfibios).
  • Ecosistemas microbianos: Son ecosistemas formados por organismos microscópicos que habitan prácticamente en todos los ambientes: terrestres, acuáticos, transicionales e incluso dentro de organismos mayores (el caso de la flora microbiana intestinal es un buen ejemplo).
  • Ecosistemas artificiales: Son los ecosistemas creados o intervenidos por el ser humano, por lo que se los puede denominar ecosistemas antrópicos. Y aquí no solo debemos pensar en los evidentes ecosistemas urbanos, sino incluso los agrícolas que nos parecen naturales y en efecto no lo son.

Cuadro sinóptico de ecosistemas

 

 

Cuadro comparativo de ecosistemas

 

 

 

 

 

Ejemplos de ecosistemas

Se ha visto arriba tipos genéricos de ecosistemas, sin embargo, si se quiere algo más concreto se debe acudir a los ejemplos de los mismos. La variedad es grande, pero a continuación presentamos algunos de ellos.

  • Arrecifes coralinos: Los arrecifes son una de las más grandes concentraciones de vida en el mundo submarino y tienen lugar tanto dentro como afuera de las estructuras coralinas que forman una barrera natural. Hay abundancia de materia orgánica en ellos, por lo que se atrae a variedad de especies de peces, crustáceos y moluscos que, a su vez, son presa de depredadores.
  • Zonas abisales submarinas: Estos son ecosistemas extremos con poca presencia animal y nula vegetal por la carencia de luz, lo cual impide la fotosíntesis. Resumiendo, se podría decir que son ecosistemas con baja diversidad. Los organismos que se encuentran se adaptan a la escasez de nutrientes, de luz y a la gigantesca presión del agua.
  • Ecosistemas lótidos: Tienen lugar dentro y en los márgenes de los ríos, arroyos o manantiales que hay en la superficie terrestre. La vida aquí se adapta al flujo del agua, que arrastra nutrientes, químicos, especies vivientes o agua oxigenada.
  • Ecosistemas polares: Son ecosistemas que se caracterizan por poca humedad atmosférica y temperaturas bajas. Sin embargo, hay variedad de vida adaptada a estas condiciones.